martes, 7 de septiembre de 2021

 LOS POLÍTIC@S: EL MAL ENDÉMICO DEL BICENTENARIO


Desde hace muchos años vengo sosteniendo que en el Perú no se practica la verdadera política y, por ende, los políticos/as son un recurso humano muy escaso. Ello ha venido configurandose en los últimos 10 años, tener un país inestable de manera sostenida, ingobernable muchas veces, deslegitimado a nivel del Ejecutivo y Legislativo. No tenemos políticos “profesionales”, de alta calidad, cualquier “caído/a del palto” puede gobernar un gobierno local, uno regional, llegar a ser Congresista, Ministro hasta Presidente de la República; o bueno, profesionales con una variedad de estudios y reconocimientos a nivel nacional e internacional, pueden serlo (o han sido), y la experiencia nos dice que NO FUERON BUENOS POLÍTICOS MENOS GESTORES.

El último mes es clara muestra de la decadencia política que venimos experimentando desde hace muchos años; “polític@s” irresponsables con el Perú y mediocres con su gestión nos vienen gobernando. La agenda que ellos y ellas tienen, gobernantes y “padres de la patria”, se centraliza únicamente en: o vacar al Presidente o en todo caso cerrar el Congreso de la República.

Les importa muy poco la reactivación económica, la lucha contra la pandemia, el alza de los productos de primera necesidad, la inseguridad ciudadana, la deforestación, el aumento de los índices de pobreza, la desnutrición o anemia, el reinicio de clases escolares; en suma, les importa un pepino el FUTURO INMEDIATO DEL PAÍS. Muchos siguen en campaña, y con la ayuda de los poderes fácticos (militares, medios de comunicación, poder económico, etc), siguen con la ojeriza de haber perdido las elecciones, no conciben aun haber sido desheredados del poder que han venido usufructuando a favor de sus privilegios durante las últimas décadas.

Son estos “políticos”, nuestros “políticos improvisados e informales”, los que acentúan la preocupante condición del país, los que han hecho de la política un medio para satisfacer necesidades personales y familiares, postrando el concepto y accionar político a una paupérrima situación y desacreditación generalizada por parte de la ciudadanía. Estos “politiqueros”, nunca entendieron ni entenderán la política. El “politiquero” solo entiende que el poder asignado a su persona, es para mejorar su calidad de vida y la de sus allegados.

Recordemos que la política verdadera, tiene su pilar principal en la democracia participativa y su herramienta principal en la gobernabilidad, a través de la legitimidad y representatividad institucional. Pero lamentablemente en el Perú, esta “política verdadera” no es entendida por la pléyade de “politiqueros” que nos representan y gobiernan. Entendamos que la política es buscar el bien común. La política es el poder para construir espacios, donde el desarrollo y la gestión sostenible sea la bandera de los representantes elegidos; sea la bandera de los “verdaderos políticos”. La política en el Perú, necesita una nueva génesis, una reestructuración total en todos sus sentidos.

Definitivamente, cada día estoy más convencido que en este mi país, EN PLENO BICENTENARIO, NO se practica la POLÍTICA, menos existen políticos/as lo que conlleva a generarse un mal generacional del Perú. Los intereses particulares y privilegios priman sobre los colectivos. Solo están para petardear, criticar y meter mano con la corrupción, nunca para dar propuestas, como UN BUEN POLÍTICO. Es de suma necesidad, cambiar la parsimonia de esta política de la corrupción, la carroña, el canibalismo y la mediocridad; hacia una POLÍTICA DECENTE Y PROPOSITIVA.

¡Perú, espero que algún día en tu suelo, se practique la POLÍTICA en mayúsculas!