viernes, 29 de septiembre de 2023

 EL ESTADO ABANDONÓ LA SALUD


A propósito de la muerte del Congresista Guerra García, (la cual lo lamento) que sufrió una descompensación en el distrito de Punta de Bombón, provincia de Islay, Arequipa, y según medios la posta médica de la localidad estaba cerrada y no había médicos para su atención. 𝗔𝗡𝗔𝗟𝗜𝗖𝗘𝗠𝗢𝗦:

Los medios nacionales se escandalizan porque el Centro Médico estaba cerrado, es que estos medios solo analizan la realidad de salubridad de Lima o las ciudades grandes; más no conocen, la problemática de salud que afecta a nuestros pueblos más abandonados y rurales. El problema de salud es un problema estructural y generacional, que escapa de las manos de los Centros de Salud o Postas Médicas más pequeñas, con un sistema o nivel que no les permite tener una atención adecuada por sus propias limitaciones.

Culpar al Centro Médico Local o a sus servidores médicos, es lo más fácil que se puede hacer, si no entendemos el panorama estructural de la salud en nuestro país. Hay Centros Médicos que ni siquiera tienen medicamentos, menos el personal suficiente para atender a sus poblaciones o políticas medicas interculturales para atender a comunidades indígenas; y eso NO ES CULPA del trabajador médico; eso responde a UNA POLÍTICA NACIONAL Y REGIONALES DE SALUD, que hace buen tiempo ha sido abandonada en el país.

El Congresista Guerra García ha sufrido las consecuencias del paupérrimo sistema de salud que existen en nuestros pueblos; y claro en vez de haber dicho que “el sueldo mínimo es mucho dinero para los trabajadores” o parlamentar desde una playa paradisiaca; pues hubiese sido mejor que sus esfuerzos se centren en construir POLÍTICAS LEGISLATIVAS para potenciar el abandonado sistema de salud peruano.

El Estado ha abandonado la salud, el sistema de salud en nuestros pueblos rurales como los de Amazonas, es una problemática que no es culpa directa del trabajador sanitario; como les dije, eso responde A POLÍTICAS a elaborar. Analicemos nomás nuestras limitadas postas médicas o centros médicos locales, con un Nivel de atención que no les permite tener un personal suficiente o medicamento adecuados para atender emergencias médicas.

𝗩𝗘𝗔𝗠𝗢𝗦, 𝘆 𝗮𝗻𝗮𝗹𝗶𝗰𝗲𝗺𝗼𝘀, según la Contraloría de la República la Corrupción en el Perú el año 2022, llevó al bolsillo de autoridades y funcionarios, más de 24 MIL MILLONES DE SOLES, si ¡CRÉALO, SE LO ROBARON!; con ese dinero sobradamente podríamos haber construido hospitales bien equipados y con suficiente personal en cada provincia de nuestro país, y así cerrar las brechas en cuanto a salud. O pues hubiésemos elevado el Nivel de los centros médicos locales o postas para una mejor atención ¿Eso es culpa de un Centro Médico con Nivel 1 y de sus trabajadores? EVIDENTEMENTE NO, sino responde a problemas estructurales y generacionales, en este caso a la CORRUPCIÓN.

𝗢𝘁𝗿𝗼𝘀 𝗱𝗮𝘁𝗼𝘀 𝘀𝗼𝗹𝗼 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗔𝗺𝗮𝘇𝗼𝗻𝗮𝘀. Según el índice de Competitividad Regional 2022, nuestra región se encuentra en el puesto 20 en cuanto a Esperanzas de Vida al Nacer, en el puesto 21 en cuanto a Desnutrición Crónica, en el puesto 18 en cuanto a Vacunación y lamentablemente ÚLTIMOS en cuanto a COBERTURA DE PERSONAL MÉDICO. Es lamentable tener estas cifras, y que responde a una Política Regional de Salud que, para nuestra desgracia, no se ha solucionado; a ello sumemos que nuestra DIRESA ha sido considerada la institución MAS CORRUPTA de Amazonas y se encuentra entre las 34 instituciones más corruptas a nivel nacional. LAMENTABLE NO ES ASÍ. ¿Eso es culpa de un Centro Médico Local o de sus trabajadores? Repito que NO, y responde a políticas nacionales y regionales que tienen que solucionarlo las “cabezas” que nos dirigen a nivel nacional y regional. Sería bueno conocer las políticas de la DIRESA para conocer el CÓMO van a repotenciar el sistema de salud en Amazonas o el Estado actual de nuestros hospitales, centros médicos o postas.

El Estado ha abandonado la salud en el Perú, y la muerte del Congresista Hernando Guerra García, es clara muestra de ese abandono y negligencia de nuestros políticos peruanos. Ni todos los privilegios que tuvo como Congresista, como un seguro de salud privado muy costoso, lograron salvarlo de la limitada y pauperrima salud pública que viven los pueblos de nuestro país.